Mi trabajo con el tambor está sostenido por un enfoque espiritual.
El tambor aporta una gran dosis de vitalidad.
El tambor es Vida.
El tambor funciona como una "usina recicladora de energía".
A través de él podemos descargar tensiones, soltar aquello que ya no nos hace bien y al mismo tiempo recargarnos con energía positiva.
El tambor es un poderoso instrumento de revitalización, y nos conecta directamente con la Fuerza de la Tierra, reparando y activando nuestra energía vital.
Tocar Tambor es conectarnos con el corazón de la Madre Tierra y con nuestros propios corazones.
El Tambor tocado conscientemente y acompañado de una intención concreta, genera vibraciones de largo alcance que propician transformaciones profundas.
Considero al Tambor como un instrumento ancestral y espiritual, que genera sonidos sagrados, conexiones y despertares.
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